martes, junio 27, 2006

Complicidad entre los Bribiesca y Saint Martín

Manuel y Jorge Bribiesca Sahagún, los hijos de la primera dama Marta Sahagún gestionaron contratos para la empresa Saint Martín, confirman empleados y ex empleados de la compañía. Dueños de un bloque de los llamados Servicios Multiples, a Saint Martin e Industrial Perforadora de Campeche, una empresa corrupta llena de gente tranza y prepotente que nacieron a la sombra de Carlos Salinas de Gortari... Hoy trabajan para Halliburton y tienen su propio Bloque para ellos solitos en los PANDURAS donde estan asociados con Saint Martin y los Bribiesca.

Villahermosa, Tabasco. En junio de 2001, Ricardo Silva, un joven poblano dedicado a los negocios de la construcción, organizó un convivio en el Teatro de la Ciudad de Villahermosa, Tabasco. De la familia presidencial llegaron al festejo Manuel y Jorge Bribiesca Sahagún, cita un alto funcionario de Pemex que pide el anonimato. De acuerdo con su versión, ahí se conocieron los hijos de Marta Sahagún y Juan de Dios Saint Martín Zepeda.

La gestión se hizo para que Pemex Exploración y Producción le asignara la licitación 18575088-033-04 -un contrato para el tratamiento de recortes de perforación por más de 200 millones de pesos y que originalmente lo había ganado la empresa PASA- a Saint Martín con un costo por 800 millones de pesos.

Además de la gestión de los Bribiesca para arreglar la licitación, los hijos de Martha Sahagún operaron para que Profepa retirara los sellos de clausura y condonara la multa de un millón 272 mil pesos a la empresa por violar la Ley General de Equilibrio Ecológico.

Entrevistados en Villahermosa, sede de la empresa Saint Martín, trabajadores y exempleados del área de administración de la empresa señalan:

Todos los del sector petrolero sabíamos que los Bribiesca arreglaban contratos. A Saint Martín le arreglaron la licitación para recortes de perforación No. 18575088-033-04, desde la dirección de PEP, a través de Carlos Morales Gil, quien mandó a un enviado por acuerdo previo con los Bribiesca, y él fue quien autorizó todo .

Los trabajadores -con más de ocho años de laborar en la empresa- dicen que no saben a cuánto ascendió la comisión que Manuel y Jorge Bribiesca habrían recibido por arreglar dicho contrato, cuyo monto inicial fue de 282 millones de pesos, aunque a Pemex se cobraron 800 millones.

El contrato

El 14 de septiembre de 2004, la Subgerencia de Recursos Materiales de la Unidad de Perforación y Mantenimiento de Pozos de PEP, con sede en Villahermosa, emitió la licitación pública internacional TLC N. 18575088-033-04 para el servicio de recolección, transporte, tratamiento y destino final de recortes generados durante la perforación y mantenimiento de pozos de las unidades operativas de Comalcalco y Delta del Tonalá de la División Sur de PEP; Reforma y Ciudad Pemex de la División Sur de PEP; y Noreste y Suroeste de la División Marina de PEP.

El 12 de noviembre se adjudicó a Saint Martín el contrato por medio de un amañado proceso de licitación, porque Exploración, entonces al mando de Luis Ramírez Corzo, por Ley no podía permitir que esa empresa licitara, porque no tenía las autorizaciones, la tecnología necesaria, ni licencia de Semarnat para el uso de tecnología Apex AM (recuperación de hidrocarburos de fangos petroleros) ni planta para su tratamiento. Tampoco estaba al día en sus declaraciones fiscales y tenía en proceso un embargo fiscal.

De todas estas ilegalidades tuvo conocimiento Ramírez Corzo, actual director general de Pemex, de acuerdo con documentos internos girados al funcionario.

En enero de 2005, cuando ya se ejecutaba el contrato, la Profepa abrió una indagatoria contra la empresa -expediente 2005/1/04/4/27- porque utilizaba tecnología especial para tratamiento de recortes que no era otra cosa que rociarlos con cal -confirman los trabajadores- y en lugar de enviarlos a una planta especial para disposición final, los depositaba en terreno a cielo abierto en las afueras de Villahermosa. Dos meses después el delegado de Profepa, Ramiro Berrón, emplazaba a la clausura.

El acta de resolución No. PFPA.27.03.04/07572005, que en mayo de 2005 emitió la Profepa, detalla las irregularidades en 41 cuartillas de cómo opera Saint Martín. En su planta de Loma de Caballo, cerca de Villahermosa, el resultado fue que la empresa no cuenta con la infraestructura para el tratamiento de residuos peligrosos .

Se impuso una sanción de un millón 272 mil 960 pesos y la clausura temporal de la planta. Al día siguiente los hermanos Saint Martín rompieron los sellos y siguieron trabajando. El delegado de Profepa, sin notificar al Ministerio Público la violación a los sellos federales, retiró la clausura y condenó la deuda. Ante su conducta, los órganos internos de control de la Semarnat abrieron una investigación integrada en el expediente DE-043/2005.

Finalmente, la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Contra el Ambiente de la PGR inició una denuncia contra los Saint Martín por violar el mandato de clausura.

Evasión fiscal

Legalmente no sólo la falta de autorizaciones a favor de Saint Martín, sino también sus irregularidades fiscales, impedían que Pemex recibiera cualquier propuesta de la empresa. Para septiembre de 2004, cuando se hizo la adjudicación No.18575088-033-04, la empresa no estaba al corriente con sus adeudos fiscales y tenía embargo en vía fiscal.

El subsecretario de Fomento y Normatividad Ambiental, Juan Rafael Elvira, dice que el procurador federal de Protección al Ambiente está consciente de las acusaciones de corrupción contra Ramiro Berrón, pero evita responder sobre su remoción.

En Villahermosa se buscó al delegado Ramiro Berrón para saber si fue presionado por los Bribiesca para condonar la deuda a Saint Martín, como refieren los trabajadores de la compañía, pero éste se negó a conceder la entrevista.

Alfonso Flores Ramírez, director de Materiales y Residuos Peligrosos de la Semarnat, dice que a pesar de las denuncias contra esta empresa no hay intención de retirarle las licencias porque fueron otorgados por tiempo indefinido , de acuerdo con consideraciones del área jurídica de la Presidencia de la República.

Los favores del delegado de Profepa a Saint Martín por intervención de Manuel y Jorge Bribiesca generaron uno de los expedientes que por encargo del secretario de la Función Pública, Eduardo Romero Ramos, auditan los despachos Ruiz, Zepeda, Cosials, Acosta y Asociados, S.C., y cuyos resultados deberán presentarse a más tardar en los primeros días de julio.

El expediente que analizan los auditores externos -copia en poder de Contralínea- integra los documentos que prueban la responsabilidad de funcionarios de la subsidiaria, entonces a cargo de Luis Ramírez Corzo, hoy director general de la paraestatal, que asignaron el irregular contrato a Saint Martín.

Red de corrupción

El 23 de agosto de 1995 los hermanos Juan de Dios y Rodolfo Saint Martín Zepeda constituyeron la empresa Saint Martín Construcciones, S.A de C.V. Desde 1992 los hermanos de origen poblano, avecindados en Coatzacoalcos, laboraban en la limpia de derrames de hidrocarburos, provistos de cubetas, barreras de contención y una cuadrilla de chaperos.

A la par de su trabajo como chapero, Juan de Dios Saint Martín se desempeñaba como hojalatero en Veracruz. Unos meses bastaron para que su empresa, que inició con una cuadrilla de chaperos, obtuviera de septiembre de 1995 a diciembre de 2000 contratos por 496 millones de pesos en Pemex Exploración y Producción, Pemex Refinación y Pemex Petroquímica.

Irónicamente, cuando Saint Martín se colocó bajo la lupa de los órganos internos de control de la paraestatal por las denuncias que acumulaba en su contra, y que hablaban no sólo de sus malas prácticas en los contratos ambientales, sino de contrataciones amañadas en complicidad con funcionarios de Pemex, los contratos que recibió y los montos se incrementaron. Por licitación fueron mil 300 millones de pesos y por vía directa más de mil 700 millones de pesos.

La red

A la par de las denuncias contra la empresa, durante el sexenio foxista llegaron, primero a Francisco Barrio Terrazas y luego a los contralores bajo el mando de Eduardo Romero Ramos, decenas de denuncias contra funcionarios de PEP y Refinación presuntamente coludidos con los empresarios poblanos.

Se abrieron indagatorias contra los funcionarios Ramón Guerra González, Ricardo Palomo Martínez, Alfredo Eduardo Guzmán Baldizán, Tomás Alfonso Figuerola Piñera, Filiberto Anaya López, Genaro Pérez Mejía, Tobías Francisco Ruiz Santiago, Carlos Rasso Zamora, Pedro Javier Caudillo Márquez, Joaquín Gerardo Obregón de la Cruz, y Carlos Morales Gil quien sucedería en el cargo a Luis Ramírez Corzo al frente de PEP. Oficialmente la mayoría de estas indagatorias, de acuerdo con información de la SFP, están en reserva .

Entre los funcionarios que guardan parentesco directo con los Saint Martín, en contravención con la Ley de Obra Pública, figuran Ramón Figuerola Piñera, gerente de Administración y Finanzas de PEP, cuñado de Juan de Dios Saint Martín (hermano de su primera esposa, Cristina Figuerola Piñera); José Luis Franco García, superintendente general del Distrito Reforma de PEP, tío político de Juan de Dios, y su primo Carlos Rasso Zamora, subdirector de Perforación y Mantenimiento de Pozos de PEP.

Un cuñado, Ramón Figuerola adjudicó contratos por 24 millones de pesos; un tío, José Luis Franco, ocho contratos por un monto de 7 millones 358 mil pesos, y un primo, Carlos Rasso Zamora, cuatro contratos por 387 millones de pesos, y otro contrato por 2 millones de dólares.

Hasta diciembre de 2004, Carlos Rasso Zamora se desempeñó como subdirector de Perforación y Mantenimiento de Pozos, área que arrastró múltiples quejas y denuncias en el OIC por presuntos actos de corrupción para beneficiar a Saint Martín con licitaciones públicas amañadas o adjudicaciones directas.

En su puesto de subdirector de la región Sur de Pemex Exploración y Producción -con sede en Villahermosa-, Carlos Morales Gil otorgó adjudicaciones directas a Saint Martín por 38 millones de pesos, y como titular de PEP asignaciones por 104 millones de pesos.

Al llegar Luis Ramírez Corzo a la Dirección General de Pemex, el primer contrato que avaló fue el de remediación en Nanchital, por 800 millones de pesos, adjudicado de manera directa a Saint Martín, quien ejecutó los procesos fraudulentos por los que recientemente Pemex denunció a la empresa. (Ana Lilia Pérez)

No hay comentarios.: