¡México no ganó, señor Calderón!

Ganó México, sentenció el señor Felipe Calderón Hinojosa al proclamarse vencedor en la contienda electoral para Presidente de la República. Tal vez tenga razón, según el espejismo de su perspectiva; él así piensa, siente, ve y quiere ver las cosas. Millones de mexicanos discrepamos, sin embargo, de su halagüeño proceder y nos sobran razones para sostener y demostrar que está equivocado en sus tendenciosas y obcecadas afirmaciones.

¡No, no ganó México! El verdadero vencedor, hasta ahora, es el todavía presidente Vicente Fox Quesada, quien hizo lo indecible, desde siempre, para dejar fuera de la contienda al señor Andrés Manuel López Obrador, como bien lo saben y les consta a los diputados del Congreso de la Unión que, ilegal e infructuosamente, desaforaron al entonces jefe de Gobierno del Distrito Federal. Y nos constan a todos los mexicanos, así mismo, los despropósitos y el incesante golpeteo del Presidente en contra de López Obrador; y nos constan fundamentalmente sus indecencias y vulgaridades a quienes tumultuariamente nos manifestamos como nunca antes había ocurrido en semejante magnitud y circunspección el 29 de agosto de 2004, en contra de su indebido, antidemocrático y exasperante proceder.

Sí, señor Calderón, el verdadero vencedor, hasta ahora, es el astuto y artero presidente Vicente Fox Quesada; y el virtual derrotado, hasta ahora también, es el proceso electoral, la democracia y los mexicanos que acudimos a las urnas confiados en que se respetaría la voluntad del pueblo, que es donde reside la soberanía de la Nación. Y habrá de respetarse porque México no está muerto, vive y palpita en el corazón de millones de mexicanos que tienen hambre y sed de justicia.

¡No, señor Calderón!, no ganó México ni usted ha ganado nada todavía. Es preciso limpiar la elección contando voto por voto para que el sufragio sea efectivo y definitorio.

José Canchota Ayala, abogado de la Generación 51 de la UNAM